En un acto emotivo y cargado de simbolismo, miles de personas de la comunidad judía en Argentina se congregaron esta tarde frente a la sede del Club Náutico Hacoaj, en la Avenida Estado de Israel 4100, en la Ciudad de Buenos Aires, para reclamar la liberación de los secuestrados en Gaza y acompañar a las familias de las víctimas de los ataques perpetrados por Hamás. La manifestación fue organizada por la Embajada de Israel en Argentina, la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), la Organización Sionista Argentina (OSA) y el Foro de Familias de Secuestrados y Desaparecidos. Entre las personalidades, sobresalió la presencia del embajador de Israel en Argentina, Eyal Sela, el ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolff, los titulares de la AMIA, Amos Linetzky, DAIA, Mauro Berenstein, y OSA, Demián Stratievsky; el titular de la Fundación TADEA, Mario Montoto.
La comunidad judía en Argentina exigió la liberación de todos los secuestrados por Hamas
Fue durante un acto en la Ciudad de Buenos Aires organizado por la Embajada de Israel, AMIA, DAIA y OSA. Hubo un mensaje de apoyo a la familia Bibas y se señaló a quienes “guardan silencio cobarde contra el odio antisemita”. Participó el embajador de Israel.
Durante el acto, el embajador de Israel en Argentina, Eyal Sela, exigió “la libertad de todos los rehenes. Parece que el cielo también lloraba hoy”. Por su parte, el titular de la AMIA, Amos Linetzky, agradeció al Gobierno argentino y al Presidente, Javier Milei, por decretar dos días de duelo nacional y señaló: “Nos cuesta todavía digerir y aceptar el pogrom del 7 de octubre de 2023″.
El evento, que comenzó a las 18:30 y fue conducido por el periodista Alfredo Leuco, tuvo como objetivo central denunciar los actos de terrorismo perpetrados por Hamas en Gaza. La convocatoria buscó unir a la sociedad en rechazo al accionar del grupo islámico que opera como proxy de Irán en Medio Oriente. Minutos antes de las 19:00, Leuco abrió el acto con un mensaje que recordó el “profundo dolor” que atraviesa la comunidad judía y argentina en general, intensificado por la reciente llegada a Israel de los cuerpos de los pequeños Kfir y Ariel Bibas y de Oded Lifshitz, víctimas de los ataques del 7 de octubre.
Entre los asistentes, se destacó una marea de pañuelos naranjas, entremezclados con banderas de Israel y Argentina, en alusión al color de cabello de los hermanos Kfir y Ariel Bibas. Este gesto se convirtió en un símbolo del dolor que atraviesa la comunidad judía tras los ataques del 7 de octubre. El color naranja también fue adoptado por varios gobiernos provinciales en Argentina, que iluminaron sus edificios en señal de solidaridad.
El embajador de Israel, Eyal Sela, recordó su visita al kibutz donde vivían los hermanos Bibas y expresó: “Teníamos la esperanza de volver a verlos desde el 7 de octubre. Sabemos que durante el cautiverio fueron asesinados. La familia Bibas pidió que no demos detalles de la brutalidad con la que fueron asesinados. Hamás es el culpable de esto”. Además, comparó los actos de Hamás con el nazismo, calificándolos como “la maldad del siglo pasado” y agregó: “El islamismo radical es la maldad de este siglo. Aún hay 33 secuestrados, incluso algunos argentinos”. Sela también agradeció al presidente argentino, Javier Milei, y al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, por su apoyo y por las medidas simbólicas adoptadas en solidaridad con las víctimas.
Las críticas a Pérez Esquivel, la Cruz Roja y una diputada
El titular de la AMIA, Amos Linetzky, no solo agradeció al gobierno argentino por decretar dos días de duelo nacional, sino que también lanzó duras críticas contra quienes “han guardado silencio” ante los ataques de Hamás. “Nos cuesta todavía digerir y aceptar el pogrom del 7 de octubre de 2023. Apuntamos contra el silencio de los cobardes que eligen callarse ante el odio fundamentalista”, afirmó. Linetzky también arremetió contra la diputada Vanidad Biassi, del Frente de Izquierda, calificándola como una “caricatura de diputada nacional” y acusándola de negar los crímenes cometidos por Hamás. Asimismo, criticó al activista Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz, a quien señaló como “vocero del islamismo fundamentalista”.
En su discurso, Linetzky también acusó a la Cruz Roja Internacional de ser “títere de Hamás” y denunció a organizaciones como Amnistía Internacional por acusar a Israel de “genocidio”. “No es un intercambio de rehenes. Es la liberación de secuestrados a cambio de terroristas”, enfatizó.
Por su parte, el titular de la DAIA, Mauro Berenstein, calificó los actos de Hamás como “el mal absoluto”. En su intervención, señaló: “El asesinato de los hermanos Kfir y Ariel Bibas es todo lo que está mal. Es el mal absoluto. El adoctrinamiento del odio es el mal absoluto”. Berenstein también destacó que Hamás condena el futuro de generaciones enteras al educarlas “a través de la muerte”.
El evento estuvo marcado por la conmoción generada tras la confirmación de que uno de los cuerpos entregados recientemente no correspondía a Shiri Bibas, madre de los niños Kfir y Ariel. Según corroboró el equipo forense de la Fuerzas de Defensa israelíes, las pruebas de ADN realizadas no arrojaron coincidencias con ninguna de las personas que permanecen secuestradas en Gaza. Este hecho profundizó el dolor de las familias y de la comunidad.
No obstante, en las últimas horas se reconoció al cuerpo de Shiri, quien será velada este miércoles en Israel.
La convocatoria al acto subrayó la necesidad de unión entre todos aquellos que defienden “el valor de la vida y rechazan el terrorismo”. Según consignaron los organizadores, el objetivo principal fue visibilizar el sufrimiento de las familias y mantener vigente el reclamo por la liberación de los secuestrados. Tal como sucedió en actos anteriores, como los realizados el 9 de octubre de 2023 y el 7 de octubre de 2024, la comunidad se reunió para expresar su solidaridad con las familias afectadas y exigir justicia.
El acto concluyó con un llamado a la esperanza y a la acción colectiva, reafirmando el compromiso de la comunidad con la defensa de la vida y la libertad. Al finalizar, los asistentes entonaron las estrofas del himno nacional argentino y el de Israel.