La candidata Graciela Ortega marcó la importancia de haberse opuesto a decisiones del gobierno como la grilla de calificación y la reforma constitucional.
Comenzó la campaña para las elecciones de nuevas autoridades de la Asociación de Educadores Provinciales (ADEP); el padrón provisorio se exhibirá el 28 de octubre, mientras que el definitivo se dará a conocer el 30 del mismo mes. Los comicios se concretarán el 11 de diciembre.
Los datos fueron provistos por la candidata a secretaria general de la Lista 24 Multicolor, Rojo, Negro y Turquesa, Graciel Ortega, quien comentó que “la realidad del docente es muy dura; hay una política individualista en los ámbitos educativos, un docente muy solo, con sed de justicia. No hay nadie del sindicato que lo acompañe”.
Asimismo, marcó que “hay problemáticas como la paritaria, el ofrecimiento de un miserable 2% y una paritaria mentirosa, porque es una decisión unilateral que el gobierno aplica, da a conocer y ejecuta. Tenemos problemas de infraestructura en escuelas, techos, paredes, sanitarios deteriorados o casi destruidos. Tenemos problemas con el transporte de maestros. Con la lucha del año pasado conseguimos un aumento y que el gobierno descuente los días de paro después de reconocer que la lucha era genuina y justa. Pasamos de haber obtenido yogur y queso para estudiantes a colegas que son notificados y cesanteados”.
En cuanto a la elección de congresales, consideró que “deja mucho que desear; vimos una situación desesperada de la conducción para poder quedarse con espacios de representación, violentando el derecho de los colegas a participar sanamente en las asambleas. Hubo gente votando que no era de la zona. Condenamos esa forma de actuar porque desvirtúa el sistema representativo de ADEP. Necesitamos recuperar el sindicato para los maestros y que no se atraviese con cuestiones políticas”.
“Proponemos un sindicato abierto, solidario, empático, con garantías jurídicas y legales que le permitan al docente hacer uso de sus derechos individuales y colectivos, que volvamos a apuntalar la acción colectiva, como cuando rechazamos la grilla de calificaciones o dijimos no a la reforma de la constitución”.
