- Nuevo reclamo vecinal en Palpalá.
- Residentes de las 96 Viviendas del Barrio Díaz Vélez se quejan de la maleza altísima que además de ser un riesgo sanitario, se convierte en escondite de delincuentes.
- Remarcaron que también tienen el problema del puente que fue derrumbado a principios de año y no se reparó nunca.
Palpalá: maleza por doquier, inseguridad y un puente caído hace casi un año
Vecinos de las 96 Viviendas, en el barrio General Mayor Días Vélez, expusieron las problemáticas con las que conviven a diario. Dicen que desde que les entregaron las casas hace tres años, nunca tuvieron una mejora en la zona.
En Palpalá, un puente lleva casi un año caído y el municipio nunca fue a arreglarlo.
El mismo conecta diversos barrios y entre ellos un sector dentro de todo nuevo:las 96 Viviendas, en el barrio General Mayor Días Vélez.
Los vecinos del lugar dijeron que ese no es el único problema que presentan sino que la maleza avanza sin control, al igual que la basura que se acumula. Además de ser un riesgo sanitario por alimañas, se convierte en el perfecto escondite de los delincuentes.
Porque como si fuera poco, los hechos de inseguridad van en aumento y los residentes de la zona no obtienen respuesta alguna de la policía.
Malezas y puente caído, la desidia del municipio
“Nos encontramos en un grupo habitacional de viviendas entregado por el IVUJ hace tres años. En este tiempo nos dimos con que no tuvimos ninguna mejora en la parte pública, los pastizales que nos rodean crecen y el puente está a 60 metros y por el aumento del caudal de agua se cayó hace un año aproximadamente y nunca lo repararon, lo único que había hecho la Municipalidad era poner una cinta de aviso que encima la sacaron”.
“En época de lluvias el olor no se aguanta y la gente tiene que transitar por el lugar donde también ya hubo accidentes y vehículos que cayeron en el zanjón sobre todo de noche también por la falta de iluminación en la zona. Esto era una ruta de escape perfecta para los malvivientes que venían y dejaban cosas que habían robado como pasaje en su escapatoria”, relató una vecina.
Delincuencia al límite
Otra residente contó en primera persona lo que le tocó vivir respecto a la inseguridad y falta de policías: “El día jueves de la semana pasada ingresaron dos ladrones a mi domicilio, yo estaba durmiendo con mis hijos arriba, son dos menores de edad. Bajé a ver y uno me apuntó con un arma diciéndome que me quede quieta porque si no las cosas iban a ser peor, luego se fueron y perdieron por este yuyeral. Esperemos que hagan algo porque yo ese día llamé a la comisaría y nunca vinieron ni dieron respuestas”.