En Defensa Civil, su coordinador, Carlos Mamaní, recordó qué hacer y qué no hacer durante estos eventos temporales.
Señaló que desde el Servicio Meteorológico Nacional les envían alertas divididos en colores de acuerdo a su intensidad: desde verde (tranquilidad) hasta rojo (de mayor intensidad), pasando por amarillo y naranja, pero aun no alcanzamos el máximo nivel de peligrosidad.
El martes a la noche hubo alerta amarilla y no se registraron tormentas intensas. Pero sí actividad eléctrica, marcó Mamaní, que provocó la muerte de la persona mencionada.
En ese sentido, recomendó no hacer actividades al aire libre, asegurar viviendas para resguardar vidas y bienes, limpiar canaletas y desagües y no acercarse ni guarecerse bajo árboles, ya que “pueden caer o atraer rayos”.
También recordó que la protección de los hogares son las llaves térmicas y el disyuntor diferencial, para evitar que una descarga eléctrica dañe aparatos. Ese disyuntor debe tener la descarga a tierra de una jabalina con cable cobreado.
También indicó no permanecer al costado de rutas o caminos porque la poca visibilidad ante una lluvia copiosa puede producir un incidente de tránsito. Por otro lado, una persona pude permanecer dentro de un automóvil pero alejado de las puertas, luneta y vidrios, porque el vehículo es metálico y hay que buscar protección en el centro del mismo.
Si no se puede circular, recomendó estacionar en la banquina, alejados de postes de media o alta tensión y de árboles.
Ante la caída de granizo, tampoco es recomendable guarecerse bajo árboles.
Instó a no concurrir a ríos, lagunas y natatorios al haber descargas eléctricas ya que los rayos son atraídos por los espejos de agua. También recomendó no bañarse en ríos o arroyos por la posible crecida de los mismos.
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Personas rescatadas en Los Alisos.
